
Está llamando a nuestra puerta.
Está cerca,
muy cerca.
Espera el preciso momento
para tomar asiento
en la sala de nuestros cuerpos,
en el patio de nuestra alma.
Llama ansiosa,
motivada por tomar vidas ajenas,
desesperada en tenerlas por colección.
Nos tiene asustados,
en vigilia,
con ganas de todo
pero sin fuerzas para nada.

¿por qué así tan luctuoso?
¿por qué así tan perverso?
¿por qué así tan macabro?
Se muere una vida
y otra empieza,
es ley en este mundo
pero la vida que perdió su vida...
¿quién la podrá recordar?
Se extinguirá completa,
como el fuego
cuando cae la lluvia;
se mudará a otro barrio
que nadie sabe cómo es;
o simplemente se elevará
al silencio estruendoso,
a aquel silencio que nos esclaviza,
silencio de poder ilimitado,
silencio de grito frustado.
Y así somos, pues,

esclavos de tu poder,
de tu autoridad aquí en la tierra,
de tus restricciones
por ley tuya, impuestas.
Mas me gustaría también verte
llorando a un ser querido
al cual no puedas rescatar
sabiéndolo ya perdido.
Y solamente así
podrá estar la cuenta saldada,
estando tu conciencia tan alterada
cuando la Gran Muerte silencie tu alma.
M' 03-06-99
4 comentarios:
thats amazing story.
when will you go online?
wow, very special, i like it.
Me gusta este escrito, es una version diferente sobre la muerte.
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